La Hermandad de San Isidro Labrador de Montemayor vivió su día grande acompañando en Romería a su patrón rodeados de naturaleza, caballos, carrozas, cabriolas y mucha gente buena.
La mañana arrancó con el tradicional desayuno molinero (pan, aceite y jamón) a cargo de la Hermandad de San Isidro en la Plaza de la Constitución, para posteriormente celebrarse una misa rociera en honor a San Isidro.
Una vez finalizada se inició la Romería que tuvo uno de los momentos mas entrañables a la llegada al paraje del Cañuelo donde la Hermandad de San Isidro Labrador quiso hacerle entrega de una placa de agradecimiento a Juan Aguilar Torres, por brindarse siempre desinteresadamente a todos los que la hermandad y sus romeros han necesitado.
Tras este momento entrañable y el reparto de los huevos, la multitud de carrozas, caballistas y vecinos ataviados con trajes de flamencos y al ritmo del tambor y la flauta, pusieron rumbo al Paraje de los Eucaliptos, donde se celebran peroles campestres y se sigue viviendo u gran día de hermandad y cariño entre los romeros de San Isidro
