La delegada territorial Educación y Deporte en Córdoba, Inmaculada Troncoso, ha valorado positivamente el aumento de centros escolares que forman parte del programa de la Consejería “Vivir y Sentir el Patrimonio”, “lo que demuestra la gran implicación del profesorado en el tratamiento transversal del patrimonio para que el alumnado, desde la infancia, lo sienta propio y, de esta forma, aprenda a respetarlo y a conservarlo”, en palabras de la delegada. En este curso escolar son 57 los centros que participan en este Programa de Innovación Educativa de la Consejería, frente a los 41 del curso 2020-2021.
“Sin duda, se hace necesario un programa educativo que permita que el alumnado sienta suyo el Patrimonio, que le ofrezca la posibilidad de asumir que su identidad deriva de referentes patrimoniales que explican qué somos, cómo somos, por qué hemos llegado a ser así y cómo nos relacionamos con los demás”, ha subrayado la delegada. Así, “nuestro Patrimonio es una herramienta eficaz en el ejercicio del derecho fundamental de acceso a la cultura y del respeto a la diversidad cultural”.
El Programa “Vivir y Sentir el Patrimonio” está dirigido al alumnado de todas las etapas educativas, desde Educación Infantil hasta Escuela de Arte, y nace con la finalidad esencial de favorecer “el disfrute, conocimiento y comprensión de los valores históricos, artísticos, etnográficos, científicos y técnicos de los bienes culturales”. En definitiva, “que el alumnado sienta suyo el Patrimonio”.
En la campiña participan en la iniciativa las Escuelas Profesionales de la Sagrada Familia de Baena, La Asunción de Montilla, Compañía de María y Alemán, ambos de Puente Genil.
En cuanto a los institutos, forman parte del programa los IES Ipagro y Vicente Núñez, ambos de Aguilar de la Frontera, Emilio Canalejo Olmeda e Inca Garcilaso, ambos de Montilla, Profesor Tierno Galván de La Rambla, y Ategua de Castro del Río.
A modo de ejemplo, el IES Ategua de Castro del Río, uno de los centros que repite este año en el Programa, se marca como objetivo “poner en valor los museos, espacios locales peculiares, dedicados a exponer arte y favorecer que el alumnado conozca a los artistas locales, sus vidas, sus historias y conozcan sus obras y creaciones”, ha explicado la delegada. “Los alumnos de este centro han iniciado su andadura este curso escolar con la visita del alumnado de 3º y 4º de ESO a los diferentes espacios museos de la localidad dentro de la apertura extraordinaria en torno a la feria artesanal ‘Ars Olea’ que Castro del Rio celebra en torno al mes de octubre”.
Metodología activa
El Programa proporciona los instrumentos para realizar programaciones e implementaciones conjuntamente, que al mismo tiempo tengan en cuenta la realidad de los medios de comunicación y la propia familia como contextos donde el Patrimonio se crea, se protege, se transmite o se pone en valor.
Por otro, ofrece recursos y herramientas claras, sencillas y útiles para que el profesorado se sienta capaz de poder aplicarlas. El fin de la educación patrimonial es conectar el Patrimonio depositaria. Esa conexión solo es posible si se consigue con la sociedad, que es su generadora, propietaria y despertar la inquietud por conocer el Patrimonio en la comunidad educativa. “Para ello se ha de poner en marcha una metodología activa y participativa, encaminada a la innovación educativa”, ha concluido la delegada.