El IV Plan de Artesanía contará con 14,45 millones para incentivar su competitividad

El Consejo de Gobierno ha aprobado el IV Plan Integral para el Fomento de la Artesanía para el periodo 2023-2026, que cuenta con una financiación de 14,45 millones de euros (un 1,2% más que el anterior) y se desarrollará a través de dos objetivos estratégicos, seis líneas estratégicas, 15 medidas y 45 acciones.

El apoyo al relevo generacional ante la elevada media de edad de los artesanos andaluces destaca en este nuevo documento de 143 páginas, que incluye dos líneas estratégicas centradas tanto en reforzar la formación, con la colaboración de las escuelas del Servicio Andaluz de Empleo (SAE) que son Centros de Referencia Nacional para la formación en artesanía, como en el impulso a la figura del aprendiz en los talleres artesanos mediante el contrato de formación en alternancia.

La aprobación de este documento estratégico da cumplimiento a la actual ley que regula al sector en Andalucía, que establece que la Consejería competente en la materia elaborará cada cuatro años un plan integral para el fomento de la artesanía en Andalucía, con el objeto de promover su permanente desarrollo y difusión, la mejora de la comercialización de los productos artesanos y el apoyo en materia formativa.

En este caso, el IV Plan Integral para el Fomento de la Artesanía en Andalucía se marca como objetivo principal incrementar la competitividad del sector incidiendo en la formación empresarial y la modernización del sector y abordando la simplificación administrativa. Además, se centrará igualmente en promocionar esta actividad a través de la marca ‘Artesanía hecha en Andalucía‘ para fomentar su promoción y visibilidad, acercándolo a la ciudadanía y respaldando su internacionalización, con el fomento de las indicaciones geográficas para productos industriales y artesanales.

En su proceso de elaboración se ha consultado a las organizaciones representativas del sector artesanal, de las empresas, de las personas trabajadoras, de los municipios y provincias y de las personas consumidoras y usuarias, incorporando las aportaciones de la Comisión de Artesanía de Andalucía. También se han celebrado reuniones con el sector y se ha tenido en cuenta lo aportado a través de cuestionarios y talleres en la fase de diagnóstico, previa a la elaboración del plan.

De esta forma, el primero de sus dos objetivos estratégicos está centrado en incentivar la competitividad mediante la formación, el dinamismo empresarial y la modernización del sector, junto a medidas de simplificación administrativa. Este objetivo concentra la mayor parte del plan con cuatro de las seis líneas estratégicas; once medidas y 28 actuaciones.

Se incluye en este primer grupo la elaboración de un estudio con las necesidades formativas del sector para posteriormente impartir acciones formativas ligadas al informe elaborado; incluir formación en nuevas tecnologías para los artesanos; jornadas formativas sobre gestión empresarial; colaboración con los Centros de Referencia Nacional y con las actividades formativas del Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico; cursos monográficos de introducción al oficio; o la preparación de aprendices para los talleres artesanos para que puedan acceder a contratos de formación en alternancia.

La elaboración de un inventario de oficios en peligro de extinción, acompañado de un programa que impulse la trasmisión entre generaciones de estas actividades; actuaciones para fomentar el emprendimiento de mujeres artesanas; píldoras informativas sobre emprendimiento y relevo generacional; campañas de promoción de la artesanía dirigidas a alumnos de primaria y secundaria figuran igualmente en este bloque, junto a distintos incentivos y ayudas dirigidos a autónomos que se inicien en la artesanía; para hacer más eficientes energéticamente los procesos productivos; para que las pymes renueven su equipamiento y herramientas y  para la digitalización.

Por último, se incluyen distintas actuaciones de simplificación administrativa como la revisión de los procedimientos y de la actual normativa del sector; la actualización del Repertorio de Oficios Artesanos o una nueva aplicación informática para el Registro de Artesanía.

Puesta en valor de la artesanía

El segundo objetivo del IV Plan Poner se dirige a potenciar la artesanía andaluza mediante actuaciones centradas en la marca ‘Artesanía hecha en Andalucía’ y en fomentar la visibilidad del sector, acercándolo a la ciudadanía y promocionando su internacionalización, con el fomento de las Indicaciones Geográficas para productos Industriales y Artesanales. Este objetivo cuenta con dos líneas estratégicas, cuatro medidas y 18 actuaciones.

Para llevarlo a cabo, se incluyen en torno a la marca andaluza artesana desde contratos de patrocinio para publicitarla; ayudas para comprar material promocional o suministro a los artesanos. También se da continuidad a los Premios de Artesanía, el inventario fotográfico de artesanos y se incluye la celebración del Congreso Andaluz de Artesanía y los Días Europeos de la Artesanía.

Otras actuaciones incluidas son la creación de las rutas artesanas de Andalucía; el fomento del distintivo ‘Andalucía, calidad artesanal’, el impulso a nuevos maestros y maestras artesanas; el fomento y la creación de un mapa interactivo de las Zonas y Puntos de Interés Artesanal (ZYPIAS); la promoción de las Indicaciones Geográficas Industriales y Artesanales (IGIA); y el fomento de la celebración de ferias, congresos y espacios expositivos.

Andalucía es una de las principales comunidades españolas en el sector de la artesanía, ya que aglutina a unas 7.000 empresas, más del 18% de las firmas españolas, proporcionando empleo a casi 20.000 personas, lo que supone alrededor del 19% del empleo del sector artesanal en España. Andalucía cuenta con el mayor número de talleres artesanales de España, alrededor de 2.500, y con uno de los repertorios de oficios más extensos.

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