Continuamente nos están recordando que tiempos atrás hubo una Guerra civil en España, por desgracia hay conciudadanos a los que no hay que recordárselo con imágenes, o con “batallitas”, ellos y ellas lo vivieron directamente en sus carnes y son testigos directos de lo que ocurrió entonces.
Sin embargo, de tarde en tarde, la tozuda guerra se materializa junto a nosotros en forma de artefacto olvidado en esos campos de viñas, ahora ya cada vez menos y más de olivos, que circundan nuestro municipio.
Y es que hace unos días apareció en un campo no muy lejano al casco urbano un artefacto explosivo, que bien pudiera ser una reliquia del bombardeo que sufrió Montilla el 13 de septiembre de 1936 por aviación republicana.
No es esta una página pensada para la historia y si para dar consejos acerca de posibles situaciones peligrosas, y más peligroso que una bomba aunque sea vieja, pues ya me dirán ustedes.
Decálogo de actuación ante la aparición de artefactos que pudieran ser explosivos:
- No tocar bajo ningún concepto. Dejarlo donde está, porque si lleva ahí más de 80 años y no ha explotado, no lo va a hacer en un rato.
- Si es posible señalizar la zona. Sobre todo porque luego habrá que indicar dónde se encuentra y quizás nos despistemos.
- No tocar bajo ningún concepto, ya lo he dicho pero somos personas y ya sabemos todos como actuamos.
- Avisar a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, preferiblemente a la Guardia Civil que son los que tienen la competencia en armas y explosivos.
- No tocar bajo ningún concepto mientras se espera a que lleguen los Tedax.
- No llamar a los amigos para ver aquello, esto es de Perogrullo, pero insisto que somos personas y ya nos conocemos.
- Cuando lleguen los Tedax, seguir las instrucciones al pie de la letra, nadie sabe más que ellos sobre cómo actuar en estos casos.
- Lo voy a decir por penúltima vez, no tocar bajo ningún concepto.
- Si le entregan el artefacto, ya desactivado, guárdelo como un buen recuerdo.
- Ahora ya si por última vez, NO TOCAR NI MANIPULAR BAJO NINGÚN CONCEPTO.
