Catalina García anuncia una inversión de 2 millones de euros en los presupuestos de 2025 para la restauración de humedales en la provincia de Córdoba, reafirmando el compromiso de la Junta de Andalucía con la conservación de estos espacios naturales
La consejera de Sostenibilidad y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, Catalina García Carrasco, ha presidido los actos conmemorativos del 40 aniversario de la declaración de las Lagunas del Sur de Córdoba como espacios naturales protegidos. Este evento, celebrado en el Centro de Visitantes de la Laguna de Zóñar, “marca cuatro décadas de compromiso y esfuerzo en la conservación de estos valiosos ecosistemas, los cuales se han convertido en referentes de biodiversidad para la provincia y para Andalucía”, ha dicho.
Al acto asistieron también el director general de Espacios Naturales Protegidos, José Enrique Borrallo; el director general de Política Forestal y Biodiversidad, Juan Ramón Pérez Valenzuela; los alcaldes de Aguilar de la Frontera, Lucena y Puente Genil, Carmen Flores, Aurelio Fernández y Sergio María Velasco, respectivamente; el delegado territorial de Sostenibilidad y Medio Ambiente en Córdoba, Rafael Martínez; el rector de la Universidad de Córdoba, Manuel Torralbo; el presidente del Patronato, José Alfonso Gómez, y el director conservador de las lagunas, Juan de la Cruz Merino, entre otros representantes institucionales y figuras clave en la protección ambiental de la zona.
Catalina García, en su intervención, ha expresado su agradecimiento a los trabajadores, asociaciones y administraciones que han dedicado sus esfuerzos para que, durante estas cuatro décadas, las Lagunas del Sur de Córdoba se mantengan como un modelo de protección ambiental. “Estas lagunas son un patrimonio natural y un ejemplo del compromiso colectivo en la conservación del medio ambiente y en la promoción de la biodiversidad”, ha incidido.
Las Lagunas del Sur de Córdoba –entre las que se encuentran la Laguna de Zóñar, Amarga, de Rincón, Tiscar, de Los Jarales y del Conde o Salobral (esta última recientemente adquirida por la Junta de Andalucía)– son ejemplos emblemáticos de la importancia de los humedales en el mantenimiento de la biodiversidad y la preservación de valores ambientales esenciales. “Estos humedales y los hábitats que engloban no solo proporcionan refugios esenciales para numerosas especies de flora y fauna, sino que también juegan un papel crucial en la regulación del ciclo del agua, la mitigación del cambio climático y el mantenimiento de la calidad del aire y el suelo”, ha agregado la consejera.
Precisamente, Catalina García ha subrayado que los Presupuestos de 2025 contemplan una partida de 1,2 millones destinada a la restauración de los humedales en las lagunas de Santiago, Dulce, Zóñar, del General y La Carrizosa. Además, se han asignado 800.000 euros para la restauración de las lagunas Amarga, Tíscar, Salobral y de Rincón. Asimismo, ha recordado que la Consejería de Sostenibilidad y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía va a destinar más de 813 millones de euros a políticas medioambientales el próximo año, con un incremento de casi un 6% respecto al ejercicio anterior. De esta cifra, la provincia de Córdoba recibirá una inversión de 45,6 millones de euros.
Asimismo, actualmente hay en ejecución un proyecto de Mejora de Biodiversidad en Montes Públicos que aborda actuaciones las lagunas de Tíscar, Zóñar y Jarales por valor de 315.000 euros.
Los actos también han incluido la entrega de reconocimientos a personas y entidades que han contribuido de manera significativa a la conservación de estos espacios naturales. Entre los homenajeados, se encuentran los cuatro presidentes del Patronato de los Humedales del Sur de Córdoba que han dirigido la protección de estas áreas desde 1984, así como los directores-conservadores de las reservas, los agentes de medio ambiente con más de 30 años de servicio. Igualmente, se ha reconocido a asociaciones, a personas de reconocido prestigio y colaboradores. Cada uno de ellos recibió un cuadro conmemorativo, en reconocimiento a su dedicación y compromiso con los humedales.
Presentación de un legado literario y científico
Otro de los momentos destacados de la jornada ha sido la presentación oficial del libro ‘Humedales cordobeses: 40 años de investigación’, una obra que recoge décadas de trabajo científico y experiencias en la protección de estos ecosistemas. Coordinado por el director conservador Juan de la Cruz Merino, este volumen cuenta con 32 capítulos y 104 colaboradores, entre investigadores y expertos, que han plasmado sus conocimientos y estudios para asegurar la conservación y restauración de las lagunas del sur de Córdoba. Este libro representa, a juicio de la consejera, “un testimonio del esfuerzo colectivo y la importancia de la investigación como pilar de las políticas de conservación”, ha señalado.
La celebración ha concluido con la liberación de aves recuperadas en el Centro de Recuperación de Especies Amenazadas de Los Villares, Córdoba, incluidas dos cigüeñas blancas, un búho real y un aguilucho lagunero.
“Este aniversario es una oportunidad para reflexionar sobre los avances realizados y los desafíos futuros en la conservación de los humedales. Es un momento para reconocer el valor de estos ecosistemas y la necesidad de continuar trabajando junto con la comunidad científica y sociedad civil para su protección”, ha declarado. El acto de hoy se complementará a lo largo de los meses de noviembre y diciembre con diversas actividades de voluntariado, una jornada técnica y charlas divulgativas en centros escolares de la provincia. También se ha diseñado material divulgativo, expositivo y otros medios que contribuyan a seguir fomentando la conservación de este patrimonio natural.
Refugio para la flora y la fauna
Las lagunas consideradas permanentes, como la de Zóñar y Amarga, desarrollan cinturones perilagunares de carrizos, juncos y eneas, que proporcionan refugio y alimento a una gran variedad de aves acuáticas. Entre las especies más destacadas se encuentran la focha moruna y la malvasía cabeciblanca, de gran interés para la conservación por sus estados de amenaza.
Las lagunas consideradas estacionales, por su parte, están caracterizadas por la presencia de tarajales y otras formaciones vegetales que también juegan un papel importante en la biodiversidad local. Estos humedales son cruciales para la invernada y nidificación de aves migratorias, convirtiéndose en un punto clave dentro de las rutas migratorias de muchas especies. Y en ellas destacan los flamencos comunes, porrones europeos, somormujos lavancos y aguiluchos laguneros, entre otros.