El Consejo de Gobierno de la Junta ha aprobado el I Plan Estratégico de la Juventud 2022-2026, una actuación de carácter transversal de toda la Administración autonómica andaluza destinada a los jóvenes de entre 14 y 35 años, que va a suponer un gasto público de 803,49 millones de euros en 60 programas que abarcan áreas como la educación y la formación, el empleo y el emprendimiento, la emancipación, la vivienda y la prevención de la violencia, entre otros.
Este plan estratégico viene a ocupar el vacío causado por la inexistencia de planes integrales para el colectivo de jóvenes desde el año 2015, cuando finalizó el denominado Plan Gyga, y concluye un amplio periodo de formulación marcado por la extensa participación en su elaboración tanto de la totalidad de los centros directivos de la Junta que desarrollan actuaciones que afectan a la población joven, como de la sociedad civil andaluza en su conjunto desde que se aprobó el inicio de su formulación en diciembre de 2019.
Según consta en el texto del documento, de más de doscientas páginas, el Plan nace con vocación de ser “transversal y omnicomprensivo de todas aquellas materias y asuntos que afecten de forma significativa a la juventud”, y aspira a convertirse en un instrumento eficaz que permita a la Comunidad Autónoma andaluza responder de manera planificada y efectiva a los importantes retos presentes y futuros que se le plantean en materia juvenil. Asimismo, pretende ser un documento de planificación “vivo, dinámico, participativo” y abierto a posibles modificaciones, que inspire las políticas públicas en materia de juventud y les permita adaptarse a las diferentes realidades que se vayan originando durante su vigencia.
Igualmente, pretende responder a los retos y desafíos que los intensos cambios sociales que ha experimentado la juventud en los últimos años, originados tanto por la globalización y la llegada de las nuevas tecnologías como por la irrupción de la crisis económica y sanitaria derivada de la pandemia.
Como población destinataria del Plan, se estima que las personas jóvenes de entre 14 y 35 años residentes en Andalucía ascienden a 2,11 millones, lo que supone el 25,04% de la población total residente en Andalucía, y el documento recoge un amplio diagnóstico de la situación del colectivo en aspectos como el empleo o la tasa de paro (del 31,8% a finales de 2021); la tasa de abandono escolar (21,9%); el nivel de emprendimiento (un 29% de Tasa de Actividad Emprendedora en menores de 35 años) o la tasa de emancipación residencial (15,9% en menores de 29 años), entre otros indicadores.
Asimismo, se ha fijado una relación de colectivos de la población joven a la que se considera de atención prioritaria, como son aquellos que tienen un bajo nivel de cualificación y capacitación; los que están en situación de desempleo, con especial atención a los que no han accedido aún al mercado laboral y a las mujeres; los que ni estudian ni trabajan o se encuentran en riesgo de exclusión social; aquellos que sufren problemas de ludopatía o los afectados por problemas de violencia juvenil.
Proceso de formulación
La elaboración del Plan ha seguido un esquema de gobernanza participativa, con la intervención de todas las consejerías de la Administración de la Junta tanto en el análisis y aportación de propuestas como en el diseño de programas y medidas. Junto a este proceso, se ha desarrollado un amplio abanico de consultas a jóvenes y agentes implicados (más de 500 personas), 8 jornadas participativas provinciales y una encuesta web de percepción del Instituto Andaluz de la Juventud contestada por más de 2.200 jóvenes.
Tras un diagnóstico previo, se celebró un Comité Asesor compuesto por técnicos de la Junta de diversos centros directivos y técnicos de juventud de diferentes Ayuntamientos, que elaboró una relación de problemas, causas y consecuencias, y un Comité Directivo que determinó problemas, necesidades y retos de atención prioritaria.
Finalmente, se ha elaborado un Plan con 21 objetivos estratégicos y 60 programas que se ordenan en torno a seis ejes: Educación y Formación; Empleo y Emprendimiento; Emancipación y Vivienda; Fomento de Hábitos Saludables y Prevención de la Violencia; Participación Juvenil y un último denominado Transversal.
Educación y Formación
El primer eje, denominado Educación y Formación, cuenta con 138,64 millones de euros y engloba 5 de los 21 objetivos estratégicos del Plan, entre ellos la reducción de las tasas de abandono escolar temprano; la mejora de los resultados educativos; la reducción del porcentaje de jóvenes que ni estudian ni trabajan, la dotación a la población joven de capacidades básicas clave y la mejora de las competencias transversales de para adquirir empleo.
Cuenta con 12 programas, entre los que podrían destacarse el PROA+, para el reforzamiento de la capacidad formativa y de transformación de los centros que presentan mayor complejidad educativa (71 millones); el de refuerzo educativo en período estival para el alumnado de hasta 2º de la ESO (34,5 millones); las unidades de acompañamiento y orientación personal y familiar del alumnado más vulnerable ( 29,93 millones); el Programa de innovación, investigación y transferencia del conocimiento en el sector turístico (1,01 millones) o el Programa de Mentoría Social en centros de zonas donde se registran situaciones graves de exclusión social (810.000 euros).
Empleo y emprendimiento
El segundo eje, Empleo y Emprendimiento, cuenta con el mayor presupuesto, un total de 544,39 millones, y también concentra el mayor número de objetivos (8) y de programas (20). Reducir la tasa de desempleo; aumentar la tasa de empleo de jóvenes con niveles de cualificación bajos o medios; disminuir la tasa de temporalidad; incrementar el porcentaje de jóvenes que trabajan en otros sectores económicos distintos al sector Servicios; aumentar el porcentaje de mujeres en sectores donde existe infrarrepresentación femenina o reducir el tiempo medio desde la finalización de estudios hasta la inserción laboral son algunos de los objetivos a los que responde este eje, a los que se suman el aumento de las posibilidades de que los jóvenes puedan afrontar con éxito los procesos de selección laboral o el incremento de la tasa de emprendimiento.
Algunos de los programas incluidos en este eje son la Iniciativa para la Activación, Impulso y Recuperación del Empleo Joven a través de incentivos a la contratación, fomentando la inserción laboral de jóvenes por parte de ayuntamientos, empresas y entidades sin ánimo de lucro (320 millones); incentivos para fomentar la contratación indefinida (100 millones) o una amplia oferta de Formación Profesional para el Empleo, especialmente en ocupaciones emergentes (19,4 millones). Otras actuaciones que complementan este eje son los incentivos por contratación indefinido tras participación en programas de Experiencias Profesionales para el Empleo (12 millones); un proyecto piloto del Programa de colaboración con Escuelas de Segunda Oportunidad (5 millones) o la introducción a la investigación de jóvenes estudiantes universitarios a través de la contratación de menores de 35 años en este ámbito (2 millones).
Emancipación y Vivienda
El tercer eje se ocupa de la Emancipación y Vivienda, y con 77,62 millones se centra en dos objetivos: el aumento de las tasas de emancipación en jóvenes de 16 a 29 y de 30 a 34 años, y la mejora las condiciones de acceso a la vivienda para jóvenes. Dentro de este apartado pueden citarse, entre los 4 programas incluidos, el de ayudas a jóvenes para el acceso a una vivienda en alquiler (70,12 millones previstos dependiendo de la financiación estatal); medidas de apoyo a mujeres jóvenes embarazadas y a madres jóvenes sin recursos con hijos (7,5 millones) o mejoras tributarias para compra o alquiler.
Fomento de Hábitos Saludables y Prevención de la Violencia
Como cuarto eje se ha definido el Fomento de Hábitos Saludables y Prevención de la Violencia, que con 34,87 millones aborda 13 programas y dos objetivos: la promoción de hábitos de vida saludables y la reducción de los índices de violencia juvenil. En este eje figuran actuaciones como la Tarjeta Joven de Transporte (31,65 millones), un plan para disminuir la mortalidad y las secuelas en las víctimas de accidentes (250.000 euros); el Plan andaluz contra el VIH/SIDA y otras ITS (1,41 millones) o actuaciones contra la ludopatía y adicciones y para la prevención del acoso escolar y el ciberacoso.
Participación juvenil
A este último eje se une también el denominado Participación Juvenil, que con 3,37 millones se centra en el objetivo estratégico de aumentar el número de jóvenes que participan activamente en el desarrollo de la sociedad, con actuaciones como el carné joven europeo, el programa de corresponsales juveniles o el fomento de la participación de jóvenes andaluces en los programas europeos, especialmente en el ámbito rural.
Transversal
Por último, se ha incluido el eje llamado “de Carácter Transversal”, en el que se desarrollan como objetivos el establecimiento de nuevos y eficaces mecanismos de comunicación y coordinación entre las administraciones públicas; el aumento y actualización de medios y canales de comunicación con el público joven y la reducción del porcentaje de jóvenes en riesgo de exclusión social.
Con un presupuesto de 4,57 millones, contiene programas como la reactivación de puntos EURODESK y Optimización de los Servicios de Información Juvenil; el Observatorio e Inventario Cartográfico de Recursos de la Juventud Andaluza; la mejora en la coordinación de las políticas públicas dirigidas a las personas jóvenes con discapacidad o actuaciones para reducir el porcentaje de jóvenes en riesgo de exclusión social como los Pisos de Inserción Laboral y Social de Jóvenes Inmigrantes de 18 a 35 años (4,36 millones).
DESGARCAR PLAN ESTRATÉGICO DE LA JUVENTUD 2022-2026, https://lajunta.es/3p0oj