El presidente emérito de COAG Córdoba, José Alonso Cervilla, y el diputado delegado de Empleo de la Diputación de Córdoba, Miguel Ruz, han entregado, reconocimientos a agricultores y ganaderos, referentes en su comarca, dentro del proyecto, subvencionado por la administración provincial, “El sector primario un nicho de empleo por explorar”.
Los reconocimientos, que fueron entregados en el salón de plenos de la Diputación de Córdoba, han sido, por su labor y vinculación por mantener un territorio rural vivo para:
Juan Carlos Balmaseda, que preside la empresa Dehesas reunidas, fundada en 2003 con ganaderos de la zona del alto Guadiato, de los Pedroches, de la zona de la Serena y de Sierra de Aracena, todos ellos criadores del cerdo ibérico de bellota con más de 15.000 hectáreas de Encinar a su disposición.
Uno de los retos de esta empresa es frenar la despoblación y el abandono de los territorios rurales. Actualmente sacrifican 6000 cerdos al año la mayoría perteneciente a la denominación de origen de los pedroches tiene una plantilla de 10 trabajadores del territorio. José Javier Carbonero, gerente de la empresa, ingeniero agrónomo y procedente de Villanueva de Córdoba, fue el encargado de recoger el reconocimiento en su nombre.
De la Campiña de Baena, han sido reconocidos los HERMANOS Peña CB. Una empresa formada por tres hermanos que comenzó su andadura en 1993 en Baena su ciudad natal siguiendo la estela de una estirpe de cabreros iniciada por su bisabuelo hasta llegar a su padre que fue el que le inculcó desde niños el cariño por las cabras y por la ganadería.
En su inicio contaban con una cabaña de 300 cabras la cual fue aumentando gracias a su esfuerzo y tesón hasta llegar a tener 1200 cabras de raza malagueña en la actualidad cuentan con una ganadería totalmente mecanizada.
Sus inquietudes y ganas de prosperar les hizo embarcarse en el proyecto de una quesería que finalmente hicieron realidad en el año 2002, y que en 2020 obtuvo el certificado como productores ecológicos.
Pascual Rovira, presidente y creador, desde 1990 de la asociación conservacionista, ADOBE, ASOCIACION DE DEFENSA DEL BORRICO DE RUTE. Su reserva natural se encuentra en pleno pinar de Rute.
Tiene más de 100 burros que cuida y protege de la extinción.
En la reserva también se puede ver desde hace años, un grupo de cerdos. Entre ellos su longevo cerdo Dior. y cabras.
Lorenzo Ruiz, apícola de Montoro, está vinculado a este sector desde niño, ya que su padre tenía colmenas para la polinización. A finales de los setenta se incorpora la que sería su mujer. Empiezan a comercializar la miel, primero con la furgoneta y en el año 96 constituyen apícola de Montoro.
Juana Redondo nació en Pozoblanco, pero muy pequeña se volvió a la Sierra. Tienen un olivar y son parte del Consejo Rector de la cooperativa, donde empezaron haciendo algunos talleres de jabón. Después de ir recopilando datos, estudiando y practicando, empezaron a hacer sus jabones. Decidieron constituirse como cooperativa, y tras 4 años crearon su marca propia.
A continuación, empezaron a hacer cremas, champús, suavizantes, muchos de ellos con principios que ayudan a mejorar problemas dermatológicos. Comercializan sus productos en ferias, en la tienda y por internet.
Salvador Fernández Rodríguez nació en 1955 y lleva toda la vida dedicado a la agricultura ha compaginado la actividad agrícola con el sindicato agrario y la defensa de los intereses de la colonia El Villar, en Fuente Palmera, de la cual es alcalde pedáneo. Dentro de la actividad agrícola se ha dedicado al algodón, las hortalizas y más recientemente ha incorporado naranjos a su explotación. Su pasión por su profesión la ha inculcado a sus hijos, dedicándose dos de ellos a la misma actividad y habiendo solicitado la ayuda de incorporación de jóvenes agricultores a la empresa agraria otros dos hijos.
Tras su jubilación constituyó la empresa explotaciones agrarias Villasur que se encarga de la gestión de cultivos y que cuenta con la certificación global GAP para los productos hortícolas. En 2022 diversifica aún más la explotación realizando plantaciones de olivar y de almendro.
Manuel Alférez, viticultor desde que tenía 15 años, cuando, con su padre plantó viña en cabeza. Con 21 años se hizo agricultor profesional ocupándome de una finca de viña en el año 1979 en régimen de aparcería.
La cultivó durante 42 años con una extensión de 10 fanegas. Ha sido parte de la ejecutiva de COAG desde el 2000 y actualmente colabora con la cooperativa la Unión formando parte de la Junta rectora como vocal del sector de la viña en la en la cooperativa, durante años ha estado en la dirección también como vocal o vicepresidente.
También es socio de la Comunidad de regantes que se creó con la solicitud y posterior concesión de concepción del agua reutilizable de la depuradora, forma parte del anteproyecto y continuará participando por la mejora de la agricultura.
