La consejera de Desarrollo Educativo y Formación Profesional, Patricia del Pozo, ha avanzado que el próximo curso estrenarán libros de texto el alumnado de 1º, 2º y 3º de Educación Secundaria Obligatoria y 1º y 2º de Formación Profesional de Grado Básico.
Además, se renovarán libros correspondientes a 1º y 2º de Educación Primaria, que se cambian todos los años por las características de estos cursos y la dotación destinada a los escolares con necesidades específicas de apoyo educativo.
Para ello, la Consejería destinará un presupuesto total de 105 millones de euros para el Programa de Gratuidad de Libros de Texto en Andalucía, una medida que beneficia a casi 900.000 de alumnos de enseñanzas obligatorias, 76.203 de la provincia de Córdoba.
Para ello, ha asegurado la consejera, el Gobierno andaluz ha realizado una apuesta inversora “sin precedentes”, con casi 8.900 millones de euros para 2024, un incremento del 40% con respecto al 2018. Además, se ha realizado un cambio de mentalidad dado que “nos hemos negado rotundamente a que Andalucía siga en el furgón de cola educativo»
De esta manera, Patricia del Pozo ha señalado que en esta “vía andaluza” de la educación está fijado como un objetivo “irrenunciable” la mejora los resultados académicos y, por este motivo, se han introducido, desde este curso, importantes novedades en el currículo, situando a Andalucía entre las comunidades autónomas que más horas de Matemáticas y Lengua imparten en sus centros educativos. Además, se ha implementado la lectura obligatoria planificada desde 1º de Primaria a 4º de la ESO, con media hora diaria de lectura de forma transversal en cualquier asignatura o área de conocimiento hasta sumar un total de 875 horas al final de la etapa obligatoria.
Otra de las iniciativas es la puesta en marcha del Plan de Refuerzo del Razonamiento Matemático que suma, a un importante refuerzo de la carga horaria dedicada a esta disciplina, distintas estrategias para acercar y potenciar el conocimiento de las Matemáticas entre el alumnado.
Como resultado de esta estrategia, ha afirmado la consejera, Andalucía ha reducido desde 2018 en 5 puntos la tasa de Abandono Escolar Temprano –del 22% al 17%–, consolidándose estos últimos años como el periodo de menor abandono escolar temprano de la historia. La tasa de titulación entre los jóvenes de 20 y 24 años, registra casi 9 puntos más desde 2018, hasta el 76%, a tan solo 3 puntos de la convergencia con la media nacional y entre los jóvenes de 16 a 24 años es del 87,5%, 5 puntos más que en 2018 y a tan sólo 2 puntos de la media nacional.
En su intervención, la titular de Desarrollo Educativo y Formación Profesional ha incidido en que el sistema educativo andaluz cuenta con la plantilla docente estable más alta de la historia de Andalucía, con más de 107.000 maestros y profesores, 6.800 más que en 2018, cuando el número de alumnos ha descendido en casi 90.000 a causa del desplome de la natalidad. “Están más reconocidos y mejor pagados, gracias al acuerdo alcanzado con las organizaciones sindicales y las patronales de las redes pública y concertada por el que nuestros maestros y profesores han dejado de ser, por fin, los peor pagados de España para situarse por encima de la media”, ha asegurado.
Trabas del Gobierno central
En este punto, Patricia del Pozo ha defendido que todos estos avances en la educación andaluza se han hecho «a pesar de la escasa ayuda del Gobierno central, que no sólo se dedica a cambiar y producir leyes sin tener en cuenta el impacto financiero real que van a tener en el sistema, sino que además desoye a Andalucía y al resto de comunidades autónomas cuando se le advierte de los problemas que eso va a generar”.
Como ejemplo, la consejera ha citado las dificultades para implantar la nueva FP por el retraso de la normativa estatal o que la Consejería haya asumido la gestión de altas de la Seguridad Social de los alumnos de FP, que solo en Málaga implica a unos 6.700 estudiantes.
También se ha referido a la “asfixia financiera” que está provocando el Gobierno central hacia Andalucía y el resto de CCAA con una forma de proceder en las que «ellos legislan pero pagan las CCAA».
Así, ha puesto ejemplos concretos, caso de los 123 millones de los fondos europeos para el primer ciclo de Infantil (0-3), diseñados por el Ministerio, «que no ha dejado usar para la gratuidad de las familias mientras que en el País Vasco sí se les adaptó a las particularidades de su sistema.
Ha mencionado la integración de los Profesores Técnicos de FP, que «ha costado 32 millones de euros a los andaluces«, las subidas de las cuotas a la Seguridad Social de los docentes, que este año suponen ya en el presupuesto un aumento de más de 80 millones» o la eliminación de las las bonificaciones totales que existían para contratos relacionados con la maternidad en la red concertada. “No hay presupuesto que aguante el ‘ yo legislo y que ya paguen las comunidades autónomas», ha dicho.
