La formación política Partido Verde, antes denominada Equo, ha recibido la aprobación del Plan de transporte Metropolitano de Córdoba por parte de la Junta de Andalucía con un comunicado crítico por su falta de ambición y por la adopción tardía de medidas que viene reclamando desde hace años.
“Este Plan nace con una carencia fundamental, la total ausencia de referencias a la recuperación del tráfico ferroviario de cercanías fuera del Valle del Guadalquivir. Los vecinos y vecinas del resto de la provincia, y muy especialmente de la Campiña, reciben por parte del gobierno andaluz un nuevo desplante ante las reivindicaciones constantes para poder disponer de un tren de cercanías que vertebre la provincia de Sur a Norte. Esta ha sido una reivindicación de nuestro partido, y de muchos otros actores sociales como CECO, desde hace años. El tren, además de servir como elemento de cohesión social, sirve como mecanismo de ahorro y eficiencia energética, así como es un instrumento necesario en la lucha contra el cambio climático, algo que figura justificadamente como prioritario en el Plan recién aprobado. No se entiende, por lo tanto, que se obvie el principal medio de transporte a la hora de reducir emisiones y descarbonizar la movilidad.” ha declarado Salustiano Luque, coportavoz provincial del Partido Verde.
Igualmente, Luque añadió que «que para las poblaciones de la Campiña sería de vital importancia el establecimiento del servicio de Cercanías por el impacto que tendría en la economía de la zona (turismo e industria) así como la prestación de un servicio a la amplia comunidad universitaria, que se desplaza a Córdoba, por su posibilidad de conexión con el complejo universitario de Rabanales. Igualmente, constituiría un elemento de gran importancia para frenar o revertir la despoblación creciente de la Provincia.»
Ana María Carnero, coportavoz del Partido Verde en Córdoba, ha apuntado por su parte que “es innegable que algunos de los elementos que contiene el Plan son positivos, tanto que hemos venido reclamándolos desde hace años, y no podemos menos que felicitarnos por su aprobación, aunque sea con un retraso tan sustancial. Los datos, los planes y la necesidad de actuar en torno a estas líneas están claras desde hace años o décadas. Este es otro triste ejemplo del retardismo climático del PP, que no niegan el Cambio Climático como sus socios negacionistas de la extrema derecha, pero arrastran los pies para tomar medidas contra el mismo y cuando lo hacen, son de todo punto insuficientes. La inacción, los retrasos y la falta de ambición contra las causas del Cambio Climático acaban teniendo trágicas consecuencias con un elevadísimo impacto humano y económico.”