El alcalde, Miguel Ruz, y el CEO del Grupo Mirai, Simón Torres, han firmado el contrato de adjudicación de la concesión administrativa de una parcela de equipamiento público de propiedad municipal, situada entre la calle Ancha y la calle Amargura, que irá destinada a la construcción de una residencia para personas mayores con 83 plazas.
Como ha explicado Miguel Ruz, la firma de esta concesión administrativa que se adjudica a la citada compañía, va a permitir la construcción de una residencia de mayores “con una inversión de cinco millones de euros y con capacidad para acoger a 83 personas para su cuidado y atención”, resaltando, además, que este proyecto “va a generar puestos de trabajo directos en nuestro pueblo”.
Con la inversión señalada, se prevé crear unos 40 puestos de trabajo directos en la localidad, contribuyendo indirectamente en el mantenimiento del empleo en sectores ajenas de servicios y transporte. Además, a largo plazo, durante el periodo de concesión de 50 años, la residencia ofrecerá un impacto positivo en la economía local.
Por su parte, Simón Torres, ha declarado tras la firma, “venimos a sumar puestos de trabajo y a invertir cinco millones de euros. Este centro está proyectado para convertirse en el nuevo hogar de nuestros mayores y por eso ponemos especial cuidado en dotarlas de un ambiente cálido, acogedor y familiar”.
Los centros se estructuran en unidades de convivencia. En la práctica, estas unidades funcionan como pequeñas residencias confortables, en las que se pueda realizar un seguimiento individualizado por parte del equipo. Todas ellas tienen su propio comedor y sala de estar, lo que favorece también la sensación de hogar.
El nuevo enfoque realizado por Vallejo, hace viable económicamente el proyecto al pasar de 56 camas del proyecto original a 83, adaptándolos a las necesidades contempladas en la nueva normativa, así como a las necesidades surgidas tras el paso de la pandemia, y con el objetivo de incrementar la eficiencia energética del edificio.