A tenor de la cantidad de jaramagos y hiervas varias podemos asegurar que la primavera ha llegado pero en algunos barrios lo sienten mas que otros.
Sabido es por todos el amor de este Ayuntamiento por la constante plantación de arboles por los contornos de nuestra amada ciudad, si bien del mantenimiento de parques y otras zonas ajardinadas, eso es otro cantar.
En esta ocasión nos centramos en las demandas de los vecinos de las periferias de Montilla que conviven con el esplendor de la primavera, y con sus problemas, los cuales no debería de existir a tenor del bando municipal de Junio del 2020 en el que el Sr. Llamas avisaba y ordenaba que las personas propietarias de terrenos tienen el deber de mantenerlos en condiciones de seguridad, salubridad y ornato público, realizando los trabajos y obras precisos para conservarlos[…]“Los solares sin edificar habrán de permanecer limpios de escombros, herbáceos (cuando estas constituyan un riesgo de incendio) y materias orgánicas.” […] los propietarios o tenedores de terrenos en suelo urbano tienen la obligación de realizar tareas de limpieza, eliminación de todo tipo de matorrales y herbáceas que puedan constituir un riesgo de incendio, desinfección y desratización de los mismos”.
Como ya hemos visto en tantas ocasiones, una cosa es la norma y otra es la posibilidad o el afán de hacerla cumplir. En esta ocasión nos centramos en las parcelas que se sitúan a la espalda del Barrio de San José que, circunvalada por la futura Ronda Norte, se encuentran en muchos casos en tierra de nadie, con unos terrenos parcelados como urbanos que realmente están aun en uso agrícola, mientras se lleva a cabo o no la ronda antes señalada.
Pues bien, mientras ocurre o no, los terrenos se encuentran como podemos ver, con el consiguiente problema hoy de pulgas, piojos, ratas y animales varios propios del campo, a los que se unirán este verano el peligro de incendio que ya estamos cansados de avisar.
Antonio Galán
