Montilla revivirá a partir de este mes de noviembre su particular historia de vinculación con el Museo del Prado gracias en esta ocasión al Cristo de la Tabla, conservado en la Iglesia Parroquial de Santiago Apóstol que viaja a Madrid para formar parte de la exposición ‘Darse la mano. Escultura y color en el Siglo de Oro’.
De autoría anónima, el Cristo de la Tabla es una imagen pintada al óleo sobre un soporte plano de madera, tanto anverso como reverso, con una cruz calada en madera dorada barroca de finales del siglo XVII, que actualmente se encuentra montada sobre un lienzo pintado al óleo y datado también del siglo XVII, que completa la escena de un Calvario con la Virgen María y San Juan, junto a unos ángeles pasionistas.
Comisariada por Manuel Arias Martínez, la exposición del Museo del Prado ilustrará la incansable búsqueda de realismo en el arte español del Renacimiento y el Barroco, en todo aquello que afectaba a la envoltura de la figura. Mostrar la integración natural de la pintura en la escultura y su triunfo en el mundo hispánico, siempre a partir de la tradición greco-latina, y destacar el valor de lo tridimensional como instrumento de persuasión, son algunos de los objetivos de esta exposición que destacará por su contenido escenográfico.
A partir de un centenar de obras, pinturas, estampas y esculturas, se muestra cómo esa tercera dimensión era la fórmula para hacer más creíble la divinidad, que producía el efecto deseado cuando interactuaba con el color para hacerse más verosímil. La exposición podrá visitarse del 19 de noviembre al 2 de marzo de 2025.