Día Mundial de los Defectos Congénitos

El próximo jueves 3 de marzo, a las 13.00 horas se llevará a cabo una charla informativa sobre defectos congénitos, en el salón de actos del hospital montillano, coincidiendo con la fecha en que se conmemora el Día Mundial de los Defectos Congénitos.

Las encargadas de ofrecer la información serán la pediatra Francisca Gallardo y la enfermera de Hospitalización María Teresa Arias. Esta última se encargará de ofrecer la perspectiva acerca de este tipo de patologías desde la vivencia familiar, mientras que la médico especialista en pediatría abordará, entre otros aspectos, la frecuencia y los principales defectos congénitos, así como sus consecuencias y las necesidades que se derivan de ellos. Pero sobre todo, se incidirá en medidas preventivas y consejos que se pueden seguir antes y durante el embarazo para evitar algunos de estos problemas de salud en el feto.

La charla informativa, que tendrá un carácter divulgativo, está dirigida a todo tipo de personas con interés en la materia, desde profesionales sanitarios y no sanitarios, como a la ciudadanía en general. Para ello, se ha invitado también a las asociaciones del área de referencia del centro hospitalario. No es necesario inscribirse, basta con acudir.

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¿Qué son los defectos congénitos?

Se consideran defectos congénitos las alteraciones en el embrión o en el feto, que se manifestarán en el curso del embarazo, en el nacimiento, o pasado algún tiempo. Ejemplos: el síndrome de Down, la ceguera y sordera de nacimiento, la mano con seis dedos…

¿Cuál es su frecuencia?

De 3 a 4 niños de cada cien presentan defectos congénitos en el momento del nacimiento. Sumados éstos a aquéllos otros cuyos defectos congénitos se manifiestan en los primeros años de la vida, la frecuencia de niños afectados puede llegar al siete por ciento.

¿Se pueden tratar y curar?

Sólo algunos defectos congénitos pueden ser tratados médica o quirúrgicamente; por ejemplo, suele ser corregible quirúrgicamente la mano con seis dedos. Pero la mayor parte de los defectos de nacimiento no son curables, como la ceguera o sordera de nacimiento o el síndrome de Down. Algunos defectos congénitos son incompatibles con la vida; los niños afectados mueren al nacer o en su infancia.

¿Qué consecuencias tienen?

En algunos casos los defectos congénitos no llegan a constituir ni enfermedad ni deficiencia importante; por ejemplo, la citada mano con seis dedos. En otros casos dan lugar a enfermedades y/o deficiencias permanentes, de mayor o menor gravedad, tal es el caso del mencionado síndrome de Down.

 

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