La delegada de Salud y Consumo, María Jesús Botella, ha presidido la cuarta reunión de coordinación de la comisión contra las agresiones al personal sanitario de la provincia, momento en el que ha destacado la nueva Ley de Función Pública andaluza para incidir en la protección de los profesionales sanitarios frente a agresiones.
En este sentido, la delegada recuerda que dicha ley estipula que “los profesionales sanitarios y el personal de gestión y servicios tendrán la consideración de autoridad pública y gozarán de la protección reconocida por la legislación vigente en el desempeño de sus funciones”.
Botella ha informado de que, durante este año, la asesoría jurídica del Servicio Andaluz de Salud (SAS) ha iniciado 16 expedientes por agresiones a profesionales sanitarios, de los que cuatro han concluido con sentencias condenatorias a agresores en la provincia.
La comisión provincial contra las agresiones a profesionales de centros sanitarios es un instrumento contemplado en el Plan de Prevención y Atención frente a agresiones a profesionales del Sistema de Salud Público de Andalucía que entró en vigor hace tres años con el objetivo de encontrar puntos de mejora para disminuir los ataques físicos o verbales a los profesionales sanitarios.
La comisión, presidida por la delegada de Salud y Consumo, cuenta con la participación de la Policía Nacional, la Guardia Civil, la asesoría jurídica del SAS, los referentes en materia de agresiones de los hospitales, distritos, áreas sanitarias, así como el Centro de Emergencias Sanitarias 061 de la provincia.
En esta ocasión, la reunión ha contado con la presencia de representantes de los colegios oficiales de Médicos y Enfermería de Córdoba, ya que ambas instituciones forman parte del recién creado Observatorio de Agresiones a Profesionales del Sistema Sanitario Público Andaluz, un instrumento de la Junta, contemplado en el Plan de Prevención de Agresiones, cuyo objetivo es proponer medidas factibles, acordes y pertinentes contra esta problemática.
La comisión ha hecho balance de los últimos meses de este año, en cuanto a intervenciones en episodios de violencia, actividades formativas, difusión sobre la prevención de las agresiones en el entorno sanitario, así como de otras medidas adoptadas para proteger a los profesionales.
Los presentes han coincidido en la necesidad de concienciar a los profesionales, víctimas de un episodio de violencia, tanto de agresiones físicas como de amenazas y coacciones, a que lo comuniquen y denuncien.
Plan de Prevención y Atención a las Agresiones
El Plan de Prevención y Atención a las Agresiones se puso en marcha en 2020 tras el acuerdo unánime de la Mesa Sectorial de Sanidad para encontrar puntos de mejora que redunden en una disminución de estos ataques verbales o físicos.
Este plan ha permitido crear la figura del ‘profesional guía’, con el objetivo de acompañar, asesorar en los trámites y dar apoyo al profesional sanitario que sufre una agresión. Igualmente, habilita canales ágiles y rápidos para que la persona víctima de una agresión no se encuentre sola momentos después de sufrir la misma. Además, se facilita atención psicológica durante el tiempo que sea necesario. Asimismo, refuerza las medidas de seguridad en los centros sanitarios y lugares de trabajo.
Por último, mejora la coordinación entre las fuerzas y cuerpos de seguridad, los profesionales de los centros sanitarios y las asesorías jurídicas provinciales. Las reuniones de coordinación de la comisión contra las agresiones al personal sanitario de la provincia permiten abordar cuestiones prácticas para evitar agresiones, así como resolver dudas y problemas que surgen en el manejo de este tipo de situaciones.