Acreditada la calidad de 11 nuevas unidades del Hospital Reina Sofía

El Hospital Reina Sofía de Córdoba consolida la apuesta por la calidad de sus servicios con la certificación de once nuevas unidades clínicas que han recibido el certificado que otorga la Consejería de Salud, a través de la Agencia de Calidad Sanitaria de Andalucía (ACSA), en un acto presidido por la consejera, Marina Álvarez.

Álvarez ha hecho entrega en el mismo hospital de los certificados de calidad a las unidades de gestión clínica (UGC) de Urgencias, Anatomía Patológica, Aparato Locomotor, Inmunología y Alergología, Neurocirugía y Neurofisiología, Oncología Médica, Reumatología, Cirugía General, Nefrología y Cirugía Ortopédica y Traumatología. En este mismo acto también ha recibido la distinción de calidad la unidad de Medicina Física y Rehabilitación, que comparte su labor asistencial con otros centros del Distrito Sanitario de Atención Primaria Córdoba y Guadalquivir.

Durante el desarrollo de este acto de reconocimiento, se ha puesto de manifiesto el esfuerzo de todos los profesionales del hospital por ofrecer una atención de calidad a los usuarios, lo que la consejera ha venido a llamar el ‘Espíritu Reina Sofía‘ de búsqueda de la excelencia en la práctica profesional, y que ya ha dado como resultado la certificación de 24 unidades y de más de 150 profesionales.

Marina Álvarez ha felicitado a los profesionales del centro, destacando que cada nueva certificación es «un paso más en el avance de la calidad en el sistema sanitario público de Andalucía, en su capacidad de lograr buenos resultados en salud y satisfacción ciudadana, que son nuestros objetivos finales». En este sentido, la consejera ha resaltado los logros de las diferentes unidades a lo largo de sus diferentes procesos de evaluación, destacando las fortalezas de cada una de ellas que les han hecho valedoras de esta certificación.

Así, por ejemplo, en el caso de la unidad de Urgencias, se ha puesto en valor el trabajo realizado para promover la continuidad asistencial a través de acuerdos formales con los diferentes servicios clínicos para mejorar la gestión de los ingresos y evitar las demoras. La experiencia de la unidad en diagnósticos y protocolos de actuación en urgencias ha sido plasmada en el libro Medicina de Urgencias y Emergencias, con la finalidad de servir de referencia para otras unidades y profesionales.

Por su parte, el informe de evaluación de la unidad de Anatomía Patológica ha destacado las acciones puestas en marcha para mejorar la accesibilidad de los pacientes, avaladas por resultados como la reducción de los tiempos de respuesta para muestras de citología. Además, en este servicio se han establecido mecanismos de continuidad asistencial como la cita directa a la consulta de ginecología en caso de resultados no esperados en pacientes procedentes de atención primaria.

El uso de las nuevas tecnologías y la información al paciente son puntos fuertes de la unidad de Aparato Locomotor, que entre sus medidas más destacables ha publicado en la página web del hospital información sobre sus profesionales, los servicios que ofrece a los pacientes y los resultados obtenidos. En su informe también se ha destacado la excelente coordinación con atención primaria y con otros servicios del hospital, como traumatología, reumatología y rehabilitación.

Asimismo, la unidad de Inmunología y Alergología destaca por su trabajo en el ámbito investigador, tal y como demuestra el elevado número de artículos publicados en revistas con factor de impacto, el número de proyectos de investigación competitivos activos o su participación en redes de investigación internacionales. La unidad, además, presenta unos resultados excelentes en la consecución de sus objetivos de los acuerdos de gestión de los últimos tres años, superando el 90%.

Por otro lado, la evaluación de la unidad de Neurocirugía y Neurofisiología ha evidenciado el trabajo realizado en pro de la seguridad del paciente, con la definición de su mapa de riesgos y del catálogo de efectos adversos, la realización de un Análisis Modal de Fallos y Efectos (AMFE) y de acciones preventivas. Destaca también la disponibilidad de un cuarto de curas, dirigido por una enfermera especializada, que permite ofrecer educación sanitaria al paciente ingresado y su familia, con el fin de fomentar el autocuidado y una atención adecuada por parte de las personas cuidadoras. Además, se ha valorado la posibilidad de contactar vía teléfono con la unidad, gracias a la inclusión de los teléfonos de la misma en el informe de alta.

Accesibilidad y organización
La accesibilidad ha sido destacada también como fortaleza en el proceso de certificación de la unidad de Oncología Médica, que ha puesto en marcha medidas como el sistema de seguimiento telefónico para pacientes oncológicos para la resolución de dudas. En este sentido, la unidad también dispone de un área en hospitalización destinada a la asistencia de corta estancia, que permite ingresos cortos y evita el paso de los pacientes por Urgencias.

En el caso de la unidad de Reumatología, el equipo evaluador ha destacado una importante actividad científica, traducida en publicaciones en revistas con factor de impacto y en varios proyectos de investigación. Asimismo, se ha puesto en valor el trabajo consensuado con profesionales de atención primaria para unificar los criterios de interconsulta y derivación de pacientes, orientado a garantizar el uso adecuado de los recursos y evitar desplazamientos innecesarios a los usuarios.

La reestructuración de la unidad de Cirugía General ha permitido mejorar la organización y logística de la atención a los pacientes, gracias a la creación de subunidades funcionales con espacios físicos diferenciados y personal facultativo y de enfermería común, pero con posibilidad de gestionar agendas, procesos y procedimientos propios. Una medida que está permitiendo optimizar recursos, homogeneizar cargas de trabajo y, sobre todo, reducir el número de visitas sucesivas y aumentando las consultas de acto único.

Por su parte, la unidad de Nefrología ha demostrado tener integrada la seguridad del paciente en su actividad habitual, implantando herramientas como un listado de verificación de puntos críticos de seguridad en dos procedimientos asistenciales, como son la biopsia renal y el cateterismo. Además, dispone de un plan de seguridad y un mapa de riesgos, asociados a los procesos asistenciales y segmentados por área de hospitalización y hemodiálisis.

El informe de evaluación de la unidad interniveles de Medicina Física y Rehabilitación ha destacado las actuaciones puestas en marcha para mejorar la información al paciente y la accesibilidad. En este sentido, la unidad ha identificado los principales problemas de accesibilidad de sus usuarios y ha adoptado las medidas oportunas: consultas preferentes, vías de derivación, y contacto telefónico y vía correo electrónico. Además, difunde información sobre la cartera de servicios, su descripción funcional, organización asistencial, localización y contacto a través de una guía de información para el usuario, que está disponible tanto en formato digital como impreso.

Finalmente, el informe de la Unidad de Cirugía Ortopédica y Traumatología ha presentado fortalezas de este servicio como su alto nivel científico-técnico en el campo de la ortopedia y traumatología, lo que la convierte en un referente a nivel andaluz y nacional. También en el ámbito de la accesibilidad de la asistencia, se ha resaltado el establecimiento de un circuito de citación conjunta con la Unidad de Radiodiagnóstico y Medicina Nuclear que permite la realización de la prueba diagnóstica que corresponda y la visita posterior a consulta externa de Traumatología en el mismo día.

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