El Ayuntamiento de Montilla avanza en el proyecto de ampliación del cementerio municipal San Francisco Solano con la construcción de 156 nuevos nichos y 68 columbarios, las dos formas de enterramiento elegidas para ocupar la parcela de 350 metros cuadrados con la que se agotan los espacios libres actuales del camposanto montillano.
En visita a las obras, que dieron comienzo el pasado 10 de diciembre a cargo de la empresa Gestión y Proyectos con un importe de adjudicación de 180.000 euros, el alcalde de Montilla, Rafael Llamas, y la teniente de alcalde de Área de Infraestructuras, Raquel Casado, han asegurado que “con este incremento del número de enterramientos se responde a la necesidad generada en los últimos años con una previsión de poder dar cobertura a los fallecimientos que pueda haber en la ciudad durante 4 o 5 años más”.
El proyecto técnico para esta intervención, marcado por el desnivel del terreno en uno de los extremos de la parcela según ha explicado la arquitecta municipal Raquel Ariza, propone la construcción en altura de los 156 nuevos nichos divididos en dos módulos, uno de ellos a doble cara, situándose de forma perpendicular la pila de columbarios.
“Se reserva la parte final del espacio para la ubicación de un horno incinerador de restos no cadavéricos, mientras que para el cerramiento de la parcela se opta por dejar abiertos varios huecos en el muro, en el final de las dos calles proyectadas, para tener acceso a las vistas a la campiña que ofrece este lugar”, ha comentado la responsable técnica de la actuación, que parte con un plazo de ejecución de cuatro meses.
Agotados los espacios libres del cementerio municipal que acaba de rebasar los 130 años de actividad desde su inauguración en 1894, Rafael Llamas anuncia para los próximos años la adquisición de nuevos terrenos en dirección norte, “hacia el único lugar donde puede crecer el cementerio y siguiendo lo que recoge nuestro Plan de Ordenación General Urbana”, especifica.
En este sentido, el alcalde confirma la existencia de unos primeros contactos con algunas de las familias propietarias de estos terrenos, aunque “es una tarea a la que nos dedicaremos en profundidad una vez que se complete la construcción de estos nuevos enterramientos, cuya inversión se hace con fondos estrictamente municipales”.
