
Muchos de nuestros dirigentes políticos deben pensar que nuestros alimentos aparecen por generación espontánea en los lineales de los supermercados y, en este caso, en el catavino.
No está de más recordarles de vez en cuando que, antes del huevo, estaba la gallina, por lo que antes del vino, está la uva, la vid, la viña y quienes la cultivan. Sin ellos no tendría sentido la bodega, ni la cata, ni la taberna, al menos con el patrimonio enológico de nuestra DOP, como eje. Sin ellos, perdemos nuestra de seña de identidad. Que nadie olvide que nuestra identidad como pueblo, agronómica, social y culturalmente, nos la da la vid y ninguno otro cultivo más.
Desde que tengo uso razón, llevo escuchando las quejas de viticultores, siempre en el olvido y en ocasiones perseguidos. Constantes vaivenes no hacen más que hundir, año a año, el compromiso con su tierra de todas y cada una de las personas que a día de hoy se atreven, sí, repito, se atreven a seguir cultivando la vid en nuestra DOP.
Por cierto, los montillanos debemos mucho a todas esas personas que generación tras generación, han traído el cultivo desde el origen de los tiempos hasta nuestros días.
¿Vamos a seguir enmascarando detrás de mil fotos institucionales, catavino en mano, que la
denominación se desangra? Podemos hacerlo, pero los números al final son los que son. No tengo inconveniente en decirles, como un técnico más que soy, la cantidad de “sentencias de muerte” que he firmado esta campaña (informes de cambio de cultivo, arranque de viña y
plantación nueva de olivar).
Si los viticultores no tenían bastantes argumentos para abandonar el barco, nuestro Ministro de Agricultura y Capataz de Honor de la Fiesta de la Vendimia, ha venido a traerles algunos más.
Con la contrastada experiencia que atesora, debería saber que el papel no lo soporta todo, y mucho menos en el campo. En aquellos días, en que su nombramiento se hacía público, me
mostraba contrariado con la decisión de nuestro Sr. Alcalde. Estaba fresco el comunicado en el que organizaciones de productores censuraban el proceder del Sr. Ministro en la negociación de la PAC. Supongo que, por razones partidistas y electorales, teníamos a la personas menos apropiada en el momento menos apropiado.
El tiempo, en el amplio sentido de la palabra, pone todo en su sitio. Simplemente hemos tenido que dejar que las exigencias de la nueva PAC calaran entre nuestros viticultores y que llegaran estas “desgraciadas” temperaturas, para poner en evidencia lo nefasto de una PAC y de un nombramiento.
Para que nadie pueda pensar que mis palabras son interesadas y/o malintencionadas, que no son verdades a medias, les remito a esta actualización del mes de febrero de legislación que ya estaba aprobada en nuestro país.
NORMATIVA NACIONAL DESARROLLO PEPAC
- Ley 30/2022 sistemas de gestión de la PAC y materias conexas
- RD 1045/2022 derechos ABRS
- RD 1047/2022 gestión y control de las intervenciones del PEPAC
- RD 1048/2022 pagos directos, requisitos comunes y solicitud único.
- RD 1049/2022 condicionalidad reforzada y condicionalidad social
- RD xxxx/2023 penalizaciones
- RD 1054/2022 SIEX, registro autonómico de explotaciones,….
- ……
DOCUMENTOS DEL MINISTERIO DE AGRICULTURA
- PEPAC V1.2
- Régimen transitorio flexibilidad ecoregímenes (05/10/2022)
- Listado provisional especies barbechos de biodiversidad
- Agricultor Activo V4
- ABRS V4
- Pago redistributivo V2
- Ecorregímenes V3
- Condicionalidad reforzada
- ….
Con esta legislación, podemos conocer dos aspectos, según mi criterio, que una vez más dan en la línea de flotación del viticultor.
*CONDICIONALIDAD REFORZADA: BCAM 5 “Gestión de la labranza para limitar el riesgo de degradación del suelo”, que obliga al viticultor y a todo aquel agricultor de cultivos leñosos, que no labre (ni con volteo ni vertical) la tierra en la dirección de la máxima pendiente cuando la pendiente media (a nivel de recinto) sea ≥ 10 %.
*ECOREGIMEN P6, “Cubiertas vegetales, espontáneas o sembradas en cultivos leñoso” que exige establecer y/o mantener una cubierta vegetal espontánea o sembrada durante todo el año, viva o agostada, el suelo no permanezca desnudo en ningún momento del año.
Esto obliga a nuestros viticultores a mantener una cubierta vegetal al menos cuatro de los seis meses que van de octubre a marzo, para cumplir con la norma de la CONDICIONALIDAD REFORZADA si la pendiente es igual o mayor del 10% en su parcela, y si quieren optar a
algún tio de ayuda se le exige mantener la cubierta todo el año con independencia de la pendiente media de su viña.
Con ello caben muchas preguntas que nos pueden hacer entender en el punto en el que nos encontramos.
¿Alguien ha pensado que la competencia de la vid por el agua, puede hacerle mermar hasta la mitad de la producción, según estudios recientes en la zona?
¿Alguien ha pensado cómo se puede realizar el establecimiento y posterior picado de la cubierta vegetal entre calles de viña tradicional?

¿Alguien ha calculado en el número de parcelas con una pendiente igual o superior al 10% en una de las zonas de calidad del marco, como es la Sierra de Montilla? ¿alguien va ha hacer algo para protegerla?
Podríamos seguir esgrimiendo razones por las cuales no son apropiadas las nuevas exigencias puestas a nuestros viticultores, pero ellos mejor que nadie son los que pueden desgranarlas, tienen la experiencia y también el valor para seguir cultivando.
El nombramiento de un Ministro de Agricultura, como capataz de Honor de la Fiesta de la Vendimia, ¿podría traer algún tipo de excepcionalidad que ayude al cumplimiento de las
norma, podría hacerlo dadas las condiciones climatológicas.
Por favor, ¿puede alguien poner sentido común a todo este desaguisado, podrían tomarse
en serio alguna vez el mundo de la viticultura?.
¿Puede alguien hacer algo por los viticultores?
Francisco J Méndez Hidalgo
Ingeniero Técnico Agrícola