Rafael Llamas destaca la “buena salud” de las finanzas municipales y valora el descenso de la deuda viva municipal en más de 60 puntos en los últimos años
La liquidación del ejercicio económico 2023 del Ayuntamiento de Montilla, de la que se dio cuenta en el último Pleno, ha puesto de relieve que el Consistorio montillano resolvió la última anualidad con un 97,4% de ejecución de los derechos de gastos reconocidos.
En comparecencia de prensa este viernes, tanto el alcalde, Rafael Llamas, como la teniente de alcalde de Hacienda, Antoñi Ramírez, han esbozado los principales datos del informe económico, que cifra en 30.691.651 euros el montante económico de las cuentas municipales para el pasado año, frente a los 24.594.106 euros previstos inicialmente en el presupuesto, cantidad que, como es habitual, se vio incrementada durante el ejercicio debido a la incorporación de ingresos no presupuestados.
Igualmente, desde el Área de Hacienda se destaca el resultado del remanente de Tesorería, con un saldo positivo de 1.452.000 euros, que quedan a disposición del Ayuntamiento para su gasto en este presupuesto de 2024. En este sentido, se prefiere esperar a conocer la aportación definitiva que el municipio recibirá vía la Partición de Ingresos del Estado (PIE) antes de abrir el debate con los grupos municipales sobre el destino de este dinero, según ha detallado la concejala montillana.
Ramírez ha informado también de la deuda viva municipal a fecha de 31 de diciembre de 2023, contabilizándola en el 20,30%, lejos del límite del 110% de los ingresos corrientes que se utiliza como referencia para autorizar o no nuevas operaciones de endeudamiento. El periodo medio de pago se cerró en el último trimestre del pasado ejercicio en 18,94 días, por debajo del límite de 30 días de obligado cumplimiento.
Por su parte, el alcalde de Montilla, Rafael Llamas, ha querido remarcar “el buen resultado” conseguido en 2023 en la gestión económica municipal, máxime cuando “se trató de un año de cierre de ciclo de inversiones de fondos europeos y un momento de muchas tensiones económicas debido a la inflación y otros elementos externos que también afectan a las cuentas de los ayuntamientos”.
En este sentido, Llamas valoró el ejercicio económico 2023 como “un año de transición, que encumbra el excelente trabajo que se viene haciendo desde hace años en el Área de Hacienda y que da paso a una nueva anualidad o ciclo político visualizando la buena salud de las finanzas del Ayuntamiento, disponibles para afrontar las nuevas inversiones que estamos analizando y estudiando para avanzar en ese modelo de ciudad emprendedora, dinámica y sostenible que queremos”.
Uno de los argumentos esgrimidos por el regidor para aplaudir “el eficiente trabajo del anterior equipo económico y del actual mandato” guarda vinculación con la deuda. “Hace una década, la deuda era uno de los problemas que limitaba al Ayuntamiento y ahora ya no lo es gracias a una reducción de más de 60 puntos, una realidad a tener en cuenta sobre todo cuando se ha compaginado con la ampliación de los servicios públicos que prestamos desde el Ayuntamiento”, ha señalado.
