Tras once años de silencio los toques romanos volvieron a sonar el Viernes Santo en Aguilar de la frontera gracias a la Agrupación Musical Imperio Romano de Nuestro Padre Jesús Nazareno de Aguilar de la Frontera
Más de 60 romanos que integran la nueva agrupación musical de Nuestro Padre Jesús Nazareno de Aguilar arroparon la estación de penitencia en este 2016 desde su salida a las 6,30 hasta su recogida a las 16h. Volvieron a estar presentes las saetas en forma de marchas procesionales tocadas con sentimiento y devoción por todos sus componentes.
También recuperando la representación del prendimiento en su máximo esplendor. Un séquito de plumas blancas acompañaba con marchas tradicionales, hermano costalero, saeta, nazareno gitano por boleras… La gran acogida de los asistentes fue demostrada por sus alagos y aplausos en todo el recorrido. Cientos de aguilarenses y devotos esperaban a cada paso la llegada de Jesús Nazareno asombrados por la actuación del nuevo imperio romano.
Esta bendita imagen es el único motivo de su reaparición….Y motor de cada ensayo de la banda…. Seis meses de intensos ensayos que dieron su fruto en un día espectacular donde hasta el tiempo acompañó el recorrido.
Resurrección de la Agrupación Musical Imperio Romano de Nuestro Padre Jesús Nazareno de Aguilar de la Frontera
Cual Ave fénix, hizo su presentación oficial en la parroquia Santa María del Soterraño el pasado viernes 4 de Marzo tras once años de silencio.
El origen del Imperio Romano se remonta a los años treinta del siglo pasado y ha tenido varias interrupciones en toda su historia. El último periodo activo comenzó en el año 1984 disolviéndose posteriormente en el año 2005.
A mediados del pasado 2015 un grupo de amigos y antiguos romanos de Aguilar de la Frontera principalmente, pero también de Lucena, La Rambla, La Carlota y Rute, han creado casi de la nada una Agrupación Musical que este año no sólo interpretará su música por las calles sino que además tiene el reto de hacerlo tras su titular: la Real Cofradía de Ntro. Padre Jesús Nazareno.
Fernando Caballero
