Jaime Márquez Velázquez es un futbolista de la categoría cadete del Atlético Séneca, al que el amor por su familia, su Montilla y sus costumbres, hunden sus raíces en lo mas profundo de su corazón.
Se hace extraño hablar con un chaval, un medio tío de 1,89 cm que te habla directo a los ojos, con la claridad de un hombre ya curtido, con esa solidez que dan los años y que, desde luego, a Jaime no le corresponden.
Jaime Márquez Velázquez, vivió su juventud entre las paredes de su añorado Colegio Salesianos de Montilla, de donde destacó que a pesar de lo bien que le apretaron para que estudiara, encontró un gran cariño y cercanía con sus profesores
La aventura de Jaime comienza hace dos años, cuando sus padres lo inscriben en un centro de tecnificación de Aguilar de la Frontera, y es el último día cuando Jose Ángel Garrido, entrenador del Séneca, se lo quiso llevar,
Sus padres quisieron que permaneciera un año mas en el Apedem con el que ascendió a primera andaluza, categoría en el que sus compañeros aun continúan.
Tras el éxito cosechado, este año se quisieron llevar a Jaime los del Salerm Puente Genil, pero en el último instante aparecieron en esta historia los ojeadores de Growler Sports, agencia internacional de jugadores, que desde entonces lo representan.
Tras estudiar las propuestas ponteñas como las nuevas del Atlético Séneca, se decantaron por el equipo de la capital, lo cual ha supuesto un duro programa de aclimatamiento, tanto en lo deportivo, como en lo personal como en lo académico,
El mundo del fútbol está lleno de fracasos, de ilusiones rotas y de sueños imposibles.
Puede que Jaime Márquez Velázquez sea uno de los muchos que no lo consigan, pero no será por falta de esfuerzo, tesón y madurez.
P.D.: La próxima entrevista espero que me la concedas en el Atlético de Madrid de tus amores.
Antonio Galán
