Fundación Social Universal recibe una ayuda de 32.000 € en la convocatoria de Fundación Cajasol, Obra Social la Caixa y Junta de Andalucía para el proyecto Hogar de tardes Mamá Margarita.
El Hogar de tardes Mamá Margarita ha sido uno de los 64 proyectos seleccionados en el marco del programa de Ayudas a Proyectos e Iniciativas Sociales en Andalucía que la Fundación Cajasol, La Obra Social La Caixa y la Junta de Andalucía han otorgado en 2016.
El pasado lunes 19 de diciembre, en Sevilla, tuvo lugar la presentación de la resolución de la convocatoria Andalucía 2016, presidida por la Consejera de Igualdad y Políticas Sociales de la Junta de Andalucía, Mª José Sánchez Rubio, el Director Territorial de Caixabank en Andalucía Occidental, Rafael Herrador y el Presidente de la Fundación Cajasol, Antonio Pulido.
Treinta y cuatro entidades y sesenta y ocho proyectos del todo el territorio andaluz recibiremos un total de 681.200 € que nos van a permitir seguir trabajando por los derechos de más de 15.512 personas que viven en situación de vulnerabilidad. Lo que va a suponer cerca de 200.000 horas de dedicación a los beneficiarios por parte de 288 profesionales y 1.708 voluntarios.
Esta convocatoria tiene la finalidad de colaborar con entidades no lucrativas que dedicamos nuestros esfuerzos a dar respuestas a los retos sociales con más incidencia en estos momentos, siendo sus líneas prioritarias Pobreza e inclusión social, Acción social e interculturalidad, Inserción sociolaboral, Discapacidad y dependencia y con especial énfasis, la infancia y la inclusión sociolaboral.
La Fundación Social Universal agradece la confianza depositada en el Hogar de tardes mamá Margarita, proyecto en el que trabajamos para hacer valer los derechos de las niñas y niños que se encuentran en situación de vulnerabilidad social.
Hogar de Tardes ‘Mamá Margarita’
El Hogar de Tardes ‘Mamá Margarita’ es una apuesta firme por que los menores conozcan y hagan valer sus derechos. En la actualidad acogemos a 34 niños y niñas con edades comprendidas entre los cinco y catorce años que cada tarde acuden a su “segundo hogar”, donde se esfuerzan y trabajan, juegan, comparten, aprenden, lloran, ríen y donde viven y crecen de la mano de un equipo de educadoras y voluntarios que guían este proceso dando lo mejor de sí mismos.
