Andalucía tiene más parados que las dos siguientes comunidades juntas y más temporalidad que la media estatal, por lo que buscar alternativas para que el tejido productivo no dependa de modas externas.
El paro de agosto evidencia una vez más que “Andalucía debe superar la dependencia absoluta del turismo, o cada septiembre será el mismo batacazo. No se trata de renunciar a un sector que genera mucha riqueza, sino de potenciar otros que la generen durante todo el año, y no concentrando el empleo en dos o tres meses”, considera Laura Estévez, secretaria de Comunicación y Estudios Sindicales de USO.
“Si Huelva es una de las pocas provincias donde ha descendido el paro en España, a pesar de tener un fuerte componente turístico en su economía, es porque también está desarrollando un tejido industrial y agrícola que complementa el mercado laboral. No es la solución enlazar temporadas de un sector y otro, pero sí al menos un primer paso hacia la diversificación, y cierta autonomía de las modas turísticas, en las que influyen factores externos”, continúa Estévez.
El resultado global de los registros de agosto es clarividente: “Andalucía y
Cataluña, con población similar, y habiendo sufrido los mayores ascensos del paro mensual en términos absolutos, tienen realidades muy diferentes. Andalucía tiene más parados que Cataluña y la Comunidad Valenciana juntas, que son las siguientes en la lista. Son también comunidades que viven del turismo, pero se han generado otras alternativas que lo respaldan”, lamenta la secretaria de Comunicación y Estudios Sindicales de USO.
En Andalucía, además, “se remarcan la temporalidad y brecha de género que sufren el resto de comunidades. Los contratos indefinidos en la comunidad no alcanzan el 7% del total de los que se firman. Y, si eres mujer, tienes menos posibilidades de encontrar un puesto de trabajo. El paro femenino es casi el 60% del total, superando las mujeres a los hombres en todos los tramos de edad”, concluye Laura Estévez.